Cada vez escuchamos más el concepto de vivienda pasiva, pero ¿en qué consisten en realidad las passivhaus? Son un tipo de vivienda creada para mantener las condiciones atmosféricas ideales en su interior logrando un ahorro energético que oscila entre el 70% y el 90%.

Deben contar con un aislamiento térmico óptimo en sus paredes exteriores, evitar los puentes térmicos y contar con ventanas y puertas de altas prestaciones.

Hoy te queremos explicar qué aspectos debes tener en cuenta:

• Aislamiento: Hay diversas maneras de conseguir el aislamiento térmico y acústico que exigen estas viviendas. Se pueden engrosar las paredes si es una doble hoja, o también podemos utilizar aislamiento por la parte exterior del ladrillo. Es de vital importancia conseguir la continuidad en toda la envolvente del aislamiento, por ello entre el encuentro entre la fachada y el forjado se pueden colocar materiales especiales.

• Estanqueidad: Es decir, la capacidad que tiene la vivienda de evitar que entren partículas (ya sea agua, aire, polvo…) externas al interior. Para conseguirlo, se necesita un seguimiento exhaustivo durante la obra. Hay varias maneras de conseguirlo, a través de láminas y cintas especiales estancas al paso de aire o bien a través de materiales consideraos estancos al paso de aire como el yeso o las pinturas estancas al aire.

• Carpinterías: En este caso deben tener valores de transmitancia térmica muy bajos.

• Sistema de ventilación: Uno de los aspectos más importantes de una passivhaus es que se puede llegar a calefactar la vivienda con el sistema de ventilación. Este sistema permite renovar el aire en la vivienda sin perder la energía en el proceso y asegura una gran calidad de aire interior.

Estos son algunos de los aspectos importantes que tenemos que tener en cuenta cuando hablamos de viviendas pasivas. Si te gustaría saber más sobre el aislamiento que necesitan, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

¡Te ayudaremos a conseguir la passivhaus de tus sueños!